Precalentar el horno a 180 °C y engrasar un molde con mantequilla y harina o papel pergamino.
Batir los huevos con el azúcar hasta obtener una mezcla espumosa y clara.
Incorporar la mantequilla derretida y la esencia de vainilla, mezclando suavemente.
Tamizar la harina de trigo, el polvo de hornear y la sal, e incorporarlos poco a poco a la mezcla junto con la harina de almendras.
Agregar la leche y mezclar hasta obtener una masa homogénea.
Verter la mezcla en el molde y espolvorear almendras laminadas por encima para lograr un acabado crujiente.
Hornear durante 30-35 minutos o hasta que un palillo salga limpio al insertarlo en el centro.
Dejar enfriar antes de desmoldar y disfrutar.
Consejos para Servir y Almacenar
Sirve el bizcocho con una taza de café o té para realzar su sabor.
Para un toque extra, acompáñalo con miel, mermelada o crema batida.
Se conserva bien en un recipiente hermético a temperatura ambiente por hasta 3 días o en el refrigerador por 5 días.
Variantes
Sin gluten: Sustituye la harina de trigo por harina de arroz o más harina de almendras.
Más esponjoso: Agrega una cucharada de yogur griego o crema agria a la mezcla.
Versión cítrica: Añade ralladura de naranja o limón para un toque refrescante.
Con chocolate: Incorpora chispas de chocolate para un extra de dulzura.
Preguntas Frecuentes
¿Puedo hacer este bizcocho sin azúcar?
Sí, puedes usar edulcorantes naturales como la stevia o el eritritol en la misma proporción.
¿Cómo lograr una corteza más crujiente?
Puedes espolvorear un poco de azúcar antes de hornear o pincelar con clara de huevo antes de añadir las almendras.
¿Se puede congelar el bizcocho?
Sí, envuélvelo en film transparente y guárdalo en el congelador hasta por 2 meses. Para consumirlo, descongélalo a temperatura ambiente.
¡Disfruta de este delicioso bizcocho de almendras con su perfecta combinación de esponjosidad y crujiente! 🍰✨