Dejar enfriar: Deja que los flanes se enfríen a temperatura ambiente y luego refrigéralos durante al menos 4 horas para que tomen una textura más firme.
Consejos para servir y almacenar:
Servir: Sirve el flan de naranja bien frío. Puedes desmoldarlo fácilmente pasando un cuchillo por los bordes y volteándolo sobre un plato. Decóralo con unas tiras finas de piel de naranja o una rodaja de naranja fresca para darle un toque más festivo.
Almacenamiento: Guarda el flan en la nevera en un recipiente cerrado durante 3-4 días. No es recomendable congelarlo, ya que puede cambiar su textura.
Variantes:
Flan de naranja y chocolate: Agrega trozos de chocolate o una capa de ganache de chocolate sobre el flan antes de hornear para un contraste delicioso entre el cítrico y lo dulce del cacao.
Flan vegano de naranja: Sustituye los huevos y la leche condensada por leche vegetal (como la de almendra o coco) y un espesante natural como agar-agar.
Preguntas frecuentes:
¿Puedo usar zumo de naranja envasado? Sí, aunque el sabor del flan será más fresco si usas zumo de naranja natural.
¿El flan se puede hacer en molde grande? Sí, puedes hacer un flan grande y cortarlo en porciones. Solo necesitarás ajustar el tiempo de cocción.
¿Cómo sé si el flan está listo? El flan debe estar firme pero ligeramente tembloroso en el centro. Si al insertar un palillo sale limpio, está listo.
¿Puedo añadir otros cítricos? Claro, puedes mezclar el zumo de naranja con limón o pomelo para darle un toque aún más ácido.
