Introducción
Las trufas de chocolate y café son el equilibrio perfecto entre el sabor intenso del cacao y el toque aromático del café. Estas pequeñas delicias son ideales para ocasiones especiales, regalos o simplemente para consentirte con un postre casero que rivaliza con los mejores confiteros. Además, son fáciles de preparar y no necesitas ser un experto para lograr resultados espectaculares.
Ingredientes
200 g de chocolate negro (mínimo 70% de cacao), picado finamente
100 ml de crema para batir
2 cucharadas de mantequilla sin sal
1 cucharada de café instantáneo o 1 shot de espresso
1 cucharadita de esencia de vainilla
Cacao en polvo, azúcar glas o chispas de chocolate para decorar
Instrucciones
Preparar la ganache:
En un recipiente resistente al calor, combina el chocolate picado y la mantequilla. Calienta la crema para batir en una cacerola a fuego medio hasta que esté a punto de hervir, pero sin que hierva por completo. Retira del fuego y vierte la crema caliente sobre el chocolate. Deja reposar durante 2-3 minutos y luego mezcla suavemente con una espátula hasta obtener una textura suave y homogénea.
Agregar el café:
Disuelve el café instantáneo en una cucharada de agua caliente o agrega el shot de espresso directamente a la ganache. Incorpora la esencia de vainilla y mezcla bien.
Enfriar:
Cubre el recipiente con papel film, asegurándote de que toque la superficie de la ganache para evitar que se forme una costra. Refrigera durante al menos 2 horas o hasta que la mezcla esté lo suficientemente firme para manejarla.
Formar las trufas:
Usando una cuchara o un sacabolas pequeño, toma porciones de la ganache y dales forma redonda con las manos. Si la mezcla se derrite rápidamente, refrigérala nuevamente antes de continuar.
Decorar:
Pasa las trufas por cacao en polvo, azúcar glas o chispas de chocolate para darles un acabado delicioso. También puedes usar nueces trituradas o coco rallado para variar la presentación.
Consejos para servir y almacenar
Servir: Sírvelas frías o a temperatura ambiente, acompañadas de una taza de café o té. Son un postre perfecto para cenas elegantes o reuniones informales.
Almacenamiento: Guarda las trufas en un recipiente hermético en el refrigerador por hasta una semana. Para un almacenamiento más prolongado, congélalas en un recipiente adecuado por hasta 3 meses.